¿Negocios online? Dibuje una manzana.

Coja papel y lápiz. Procure ajustar la luz del flexo y relajarse. Ponga su mente al servicio de la creatividad y proceda: dibuje una manzana. Del resultado de su obra dependerá su éxito. Una vez realizado su dibujo y con él delante, siga leyendo… El método es aplicable a cualquier ámbito y actividad, y bien podría haber servido a muchos de los casos de éxito más representativos de nuestros días, como digo, en cualquier ámbito o actividad. ¿Dibujar una manzana puede decidir mi suerte en el negocio que voy a emprender? Ésa puede ser la reflexión que muchos se estén haciendo en este momento, no sin cierta incredulidad. Y lo cierto es que, a priori, lo absurdo de la pregunta bien podría asemejarse a sentencias como las que siguen: se puede llegar a generar mil millones de dólares en ventas anuales comercializando zapatos a través de la web; o como una ferretería ubicada en una localidad de poco más de 9000 habitantes puede, gracias a Internet, contra restar la presencia de grandes almacenes tipo Leroy Merlin o Bauhaus, pasando de vender en una barriada a hacerlo a toda Europa y con cotas de crecimiento del 300% anuales. Hablamos de dos casos de diversa índole, por aquello de no tomar la excepción como regla, Zappos.com y BricMania.com:

Uno, el primero, conocido por todos y asentado en Estados Unidos, en la grandilocuencia de un país con más de 300 millones de habitantes y con los prejuicios respecto a la compra en Internet más que superados. Sin ir más lejos Norteamérica ocupa los primeros puestos en el ránking mundial de ecommerce y sus cifras están a años luz de las españolas. El segundo caso, por el contrario, nada tiene que ver con la hegemónica posición yankee en cuanto a negocios online. Hablamos de Montmeló, un pueblo situado a escasos 20 kilómetros de Barcelona y conocido casi en exclusividad por su circuito de competición. Allí, Lluís Serra(@lluis_serra), propietario de una ferretería física decide un buen día diversificar su negocio vendiendo sus productos por Internet. ¿Pero qué tiene que ver todo esto con una manzana? Haga usted mismo la prueba. Reúna a una decena de amigos y pídales que dibujen una manzana. Unos dibujarán una manzana verde, otros roja, unos mordida, quizá alguno en su afán por esmerarse, creyéndose el mayor de los creativos, haga salir un gusano de alguno de los orificios, o un incluso la vean en un árbol, el caso es que pocos, por no decir ninguno, dibujará una manzana de calles. ¿Qué dibujó usted al inicio de este post?

Es aquí donde la creatividad tiene un papel esencial. En saber ver ese otro tipo de manzana, en aprovechar el lienzo en blanco que nos brinda la Red para plasmar nuestra imaginación y crear negocios como BricMania.com o Zappos.com. El símil no es propio y lo hemos podido escuchar en infinidad de ocasiones, incluso en muchas otras versiones, o quizá lo hemos puesto en práctica sin pararnos en la reflexión frutal que propongo. El resultado es el mismo, no hace falta ser experto de nada para darse cuenta de que la democratización que permite Internet a día de hoy le otorga un papel privilegiado a la creatividad. Decía Rodolfo Carpintier en las páginas de Ecommretail que “mientras el comercio electrónico sólo replique al físico quedará recluido a un papel marginal” y animaba a “aprovechar las posibilidades del mundo online para reinventar los negocios”. O lo que es lo mismo: dibujemos una manzana. En este sentido, recogía el blog de Seth Godin la historia de un cliente de Zappos.com: Zaz Lamarr. Así lo narra www.desencadenado.com :“Resulta que Zaz Lamarr compró unos zapatos para su madre. La señora falleció, y Lamarr se encontró con siete pares de zapatos que no necesitaba. (…) Zappos a pesar de que había pasado el plazo de quince días, no sólo aceptó la devolución, sino que cambió su política habitual y en lugar de ser Lammar la que llevara los zapatos a UPS, envió un mensajero a recogerlos a su casa. Hasta ahí perfecto. Ahora viene lo extraordinario (…) Zappos.com, una fría tienda online, envía un enorme ramo de flores a una clienta que ha devuelto siete pares de zapatos.” Como bien apunta el blog hay muchas empresas que invierten grandes cifras en CRM, estudios de mercado, programas de fidelización, en contratar expertos en diversas materias tecnológicas… y en este caso, el espíritu corporativo de Zappos.com fue la mejor inversión de la compañía. La creatividad como arma, como nube frente al cemento. El caso de BricMania.com no difiere mucho en cuanto a las cotas creativas del de Zappos.com, salvando las distancias entre uno y otro.

El proyecto de Lluís Serra (@lluis_serra) va desde una atención personalizada y gratuita vía Skype a todos aquellos clientes que precisan de una voz experta detrás de una web, a una segmentación por sectores de actividad: “ofrecemos un servicio personalizado a cada oficio, hay que entender que no es lo mismo el tornillo que utiliza un mecánico náutico que el de un carpintero”, comenta el propio Serra mientras afirma de la necesidad de crear vídeos especializados donde se muestre al cliente de qué manera utilizar los productos que vende en su web, al más puro estilo k-tuin.com. De vender en un barrio de Montmeló a hacerlo a toda España y gran parte de Europa (Holanda, Francia e Italia). Así que volvamos al punto de inicio. A lo de las manzanas. Porque este post no habla de ecommerce ni de negocios online, habla de manzanas. Así que coja papel y lápiz. Procure ajustar la luz del flexo y relajarse. Ponga su mente al servicio de la creatividad y proceda: dibuje una manzana. Del resultado de su obra dependerá su éxito.